LANZAMIENTO
NOVELA
EL SOLAR DE LAS MALAS POSTURAS
Alejandro Pedreros
Bogotá, 1970.
Es odontólogo con especialidad en Calidad, trabaja en humanización de servicios de salud en la red de hospitales públicos de Bogotá. Asimismo, es profesional en Filosofía y Letras de la Universidad de la Salle, Magister en Creación Literaria de la Universidad Central. Ha incursionado en el campo de la narrativa, el cuento y la poesía. Ha tomado múltiples talleres de poesía, cuento y narrativa en entidades como la Casa de Poesía Silva, la Universidad del Rosario, Universidad Nacional, Universidad Central, IDARTES y el taller Siembra de Palabras.
Tiene dos novelas publicadas: Devora la consciencia (2017) y El solar de las malas posturas (2024). Sus cuentos han sido publicados en la antología Madeja Literaria Andromedaria 2024, y algunos de sus poemas en la Revista Leukemia Literaria.
Reseña del lanzamiento
El solar de las malas posturas
La novela El solar de las malas posturas, publicada y editada por la editorial Totuma Libros, tuvo varias presentaciones en la ciudad de Bogotá.
Para Alejandro Pedreros, el lanzamiento de esta obra debía hacerse en un espacio que honrara la intimidad y autenticidad de la historia misma. Por tal razón, el 4 de octubre, en el Centro Cultural El Establo Pegaso, ubicado en La Candelaria, Bogotá, se dio el primer encuentro entre el autor y sus lectores. En conversación con sus editores, Alejandro compartió su proceso creativo, desde la idea original hasta el resultado en que la cotidianidad y la convivencia moldearon a los personajes y sus historias. Esta presentación fue un momento especial para el autor, ya que tuvo la oportunidad de compartir de manera directa con sus amigos y lectores sus creaciones y decisiones en cada página.
La cercanía se profundizó aún más con el público en la segunda presentación del libro, el 26 de octubre en Cultivo, una biblioteca de Chapinero, donde Pablo Arciniegas entrevistó a Alejandro en una charla que el autor describió como “fascinante”. La conversación abordó temas profundamente conectados con la obra; desde la política hasta la experiencia de la comunidad queer y LGBTIQ+. Reflexionaron sobre cómo la literatura es tanto una fuente de placer, como una herramienta poderosa contra la represión. Además, Alejandro y Pablo coincidieron en ver a la escritura como un gozo y un acto de resistencia, ideas que impregnan El solar de las malas posturas y lo dotan de una intensidad que se percibe en cada palabra.
En la obra, el estilo de Pedreros se caracteriza por una prosa visceral y poética, donde la enfermedad y el erotismo son hilos que se entrelazan para tejer una anatomía sensible y humana. La novela desarrolla un monólogo interno que da voz a los pensamientos y deseos de Jeremías, el texto se transforma en un espacio donde lo físico se convierte en palabras, y lo espiritual se materializa. Jeremías idealiza la realidad que lo rodea. Por lo anterior, en la novela, la homoafectividad no es bandera ni discurso, más bien, es una condición vital que expone la universalidad del amor y la tragedia de la vulnerabilidad.
El solar de las malas posturas es una invitación a explorar los límites de la sensualidad humana, la fragilidad y el dolor compartido, en un ambiente que combina el rigor académico con la intimidad de una historia de amor. Su lectura es un ritual de revelación para cualquiera que busque sumergirse en una obra que, como pocas, logra hacer palpable el poder de la literatura para evocar lo más profundo y elemental de la humanidad.
Por: Juan David Moreno